“La clave en un equipo de fútbol es tener contentos a los 11 suplentes, ya que los 11 titulares ya lo están por el hecho de jugar”
Un entrenador debe tomar muchas decisiones en su “trabajo” diario, a saber, preparar entrenamientos acordes a lo que se quiere trabajar, hacer jugar al equipo de la manera más provechosa teniendo en cuenta las características de sus jugadores, decidir cómo jugar, que estilo tener……y por supuesto, tomar la que para mí es la decisión más difícil, decidir quienes juegan y quienes se quedan fuera de la convocatoria.
Tener una plantilla larga es una bendición para cualquier entrenador, se dispone de múltiples opciones, puedes jugar con varios esquemas y disposiciones y en general, tal competencia hace mejorar al equipo. Pero tiene una pega, bastante grande, cada fin de semana un gran número de jugadores se debe quedar en “casa”.
Y ahí está la dificultad, porque cuando 22 jugadoras han trabajado muy bien durante toda la semana, dejar a 6 sin jugar es complicado. Yo he jugado al fútbol, y en todos mis años me han tocado temporadas en las que me pasaba más tiempo en la grada o el banquillo que en el campo. Y es duro, muy duro. No oír o leer tu nombre en la convocatoria te baja los ánimos y te quita (en mi caso solo durante unos días) las ganas de fútbol.
Pero es una decisión que debemos tomar como entrenadores, intentando ser justos a la vez que intentas llevar a cada partido las jugadoras que más se amoldan a la forma de jugar que vas a tener.
En mi caso lo tengo claro, mi cuerpo técnico apunta todos los minutos que juega cada jugadora para tener controlado en todo momento quien juega más o menos. No pienso ser de esos entrenadores que dejan una y otra semana a un jugador sin convocar, hundiéndole la moral, no. La rotación en mis convocatorias va a ser constante ya que en la fase de formación en la que nos encontramos es fundamental que todos los jugadores tengan la oportunidad de competir, ya que en mi opinión es la fase donde se produce la transferencia de todo lo ensayado durante la semana.
Y desde aquí lanzo una pregunta a los entrenadores que me leen: ¿Vosotros como tratáis este “problema”?, ¿Cómo hacéis para premiar el trabajo de todos/as sin volver locos/as a los jugadores/as con cambios constantes?
Y a mis jugadoras que también me leen, paciencia, las oportunidades llegan para todas, como siempre os digo, el trabajo duro siempre tiene su recompensa.
Se que es dificil y no debes tomarlo como el credo ni algo que se deba seguir al milímetro pero, con datos objetivos y métodos existentes y muy utilizados en distintos ámbitos, puedes tomar decisiones en base a criterios y puntuaciones que puedes definir con tus compañero, como un equipo. Como sabes, no hay nada que una buena hoja de excel no pueda arreglar :) Seguirá siendo dificil pero te dará las bases para tomar la decisión más adecuada en cada momento.
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