El comienzo de todo.

Hoy en el blog no vamos a hablar de entrenamientos ni de nada relacionado.

O tal vez sí esta relacionado, porque hoy os voy a contar donde nació mi afición por este deporte y que me ha llevado, muchos años después, aquí.

Poneos cómodos que la máquina del tiempo arranca....




Mi primer recuerdo futbolistico data del año 1993. El 20 de junio de ese año  celebraba mi noveno cumpleaños (cumplir años a finales de Junio me ha echo celebrarlos siempre con el fútbol como protagonista, ya sea en Ligas, Mundiales o Eurocopas).

Y ese mismo día, el Madrid se jugaba la Liga en Tenerife, después de haberla perdido dramáticamente justo un año antes en el mismo lugar.

El que fuera mi cumpleaños no impidió a los hombres de la familia arremolinarse alrededor de la tele para ver como los tinerfeños nos arruinaban la segunda Liga consecutiva.

Pese a que yo ya empezaba a dar patadas (muy malamente, todo sea dicho) con los amigos, el fútbol de competición no me llamaba la atención, solo veía alguno de los partidos que televisaba TeleMadrid los sábados con el inconfundible Jose Maria del Toro narrando o algun partido suelto de la Selección.

Pero llegó finales de 1994 y todo cambió, después de ver al Depor perder una Liga in extremis (la tercera consecutiva que ganaba el Barsa en la última jornada) con Djukic de protagonista, comenzó el Mundial de USA, el primer Mundial que vivía y para mi, eso fue un acontecimiento.

Si tenia cromos, había que coleccionarlo y seguirlo.

Partidos de madrugada, la selección.....todo hizo un combo perfecto gracias al cual me convertí, casi de la noche a la mañana, en un autentico enfermizo del fútbol.
Me uní a mi padre y a sus amigos en cada partido de la selección, desde el 2-2 inaugural contra Corea al fatídico 2-1 frente a Italia en cuartos, pasando con el 1-1 a Alemania con el golazo de Goico o el 3-0 frente a Suiza en Octavos.




Hasta que el Mundial acabó para España con el codazo de Tassoti a Luis Enrique y también para mi, que me volví a convertir en un niño alejado del fútbol.

Del resto del Mundial solo vi a ratos, el tercer y cuarto puesto entre Bulgaria y Suecia, donde los Suecos comandados por Thomas Brolin pasaron por encima de la Bulgaria de Stoickhov.

Ni siquiera vi la final, pero algo había despertado en mi, el año siguiente viví la primera Liga del Madrid, con Zamorano de Pichichi y Valdano de entrenador y ya era un asiduo al programa Estudio Estadio con los resúmenes y al Carrusel los domingos por la tarde clasificación y quiniela en mano.

Cada verano el álbum de cromos de cada temporada era obligatorio, así como los 4 sobres (a 25 pesetas el sobre) cada fin de semana....

Todos completados, con sus colocas, fichajes...

Desde ese momento hasta hoy han pasado 20 años y lo que empezó siendo algo visto con curiosidad se ha convertido en una pasión, jugandolo, viéndolo y hasta estudiándolo.

Colección de VHS, cuando no existía Internet

Una afición un poco cara, sobre todo si se coleccionan camisetas

Y aquí seguimos, disfrutando y sufriendo este deporte como aficionado y como entrenador (ya las rodillas no dejan disfrutarlo como jugador), y que sea así por mucho tiempo más.