jueves, 30 de julio de 2015

Planificar una Pretemporada

Ya estamos en Agosto, y en unas pocas semanas todos empezaréis a entrenar preparando la nueva temporada. Yo tambien debería estar inmerso en esa tarea, pero finalmente no podré entrenar en el Altlético Valdemoro por ser imposible compatibilizarlo con el trabajo.

Pero pese a eso, os traigo un ejemplo de planificación de lo que hubiese sido mi pretemporada.


Antes de nada, decir que este microciclo compuesto por 4 semanas esta pensado por mi y basado en mi corta experiencia en los banquillos, además, dependiendo de cuantas semanas anteriores al inicio de la competición se empiece a entrenar o incluso el nivel físico que se quiere alcanzar en esas fechas, el microciclo deberá ser modificado, aumentando o disminuyendo el tipo de trabajo a realizar.


Aquí tenemos una pretemporada de 4 semanas, con 3 días de entrenamiento por semana y con un partido amistoso en cada una de ellas.

El porcentaje que aparece en cada concepto a trabajar, es el tiempo de cada sesión de entrenamiento que debe ocupar.

Cada entrenador debe ser capaz de realizar unas rutinas en las cuales se trabajen esos conceptos, preferiblemente con el balón por medio, aunque todos sabemos que ciertos factores son muy difíciles de trabajar intentando integrarlas en un ejercicio basado en el juego.

  • Es aconsejable, que antes de llegar el primer día, los jugadores hayan trabajado por su cuenta en el periodo vacacional, porque cuanto más en forma lleguen, más rápido se alcanzará el nivel técnico-táctico-físico buscado.

  • Los primeros días es imporante realizar un trabajo físico de base (resistencia) ya que es a partir de este "fondo", desde el cual podremos trabajar más tarde otros factores como la velocidad o la fuerza.  La carga de trabajo estas primeras semanas debe ser alto, mucho volumen que nos permita poner el corazón a tono.

  • Es importante tambien, a partir del 3º - 4º día, comenzar a introducir aspectos tácticos de nuestro juego, para que los jugadores asimilen nuestro modelo desde los primeros días.

  • Por supuesto, no debemos olvidar el trabajo de prevención de lesiones, ya que en esta época temprana de la temporada, las sobrecargas, contracturas y microroturas pueden ser muy comunes y cortar la preparación de los jugadores.

  • A partir de la 5º sesión, y una vez conseguida una base física sobre la que trabajar, empezaremos a realizar trabajos de velocidad, aspecto muy importante en el fútbol.  

  • Progresivamente, en las siguientes sesiones iremos bajando el volumen de la carga física y aumentando los ejercicios en los que se trabajen los esfuerzos cortos e intensos. 
 

  • Para finalmente, coincidiendo con la última semana de preparación, empezar a introducir ejercicios de fuerza, combinandolos con el trabajo de velocidad. En estas fechas, el trabajo de resistencia debe haber ido desapareciendo de nuestra planificación. 



Indudablemente, tanto la velocidad como la fuerza, se pueden (y deben) seguir trabajando a lo largo de la temporada, y coincidiendo con los parones ligueros (Navidad, Semana Santa), realizar alguna semana de "pretemporada" en los que volvamos a trabajar la base física, la cual se pierde rápido con la inactividad.

Por supuesto, lo mejor que podeis hacer, es rodearos de preparadores físicos, que son los autenticos maestros en este aspecto, como ya os hablé en el blog en su día.


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